4 jul 2012

Impotencia.

 Mi única debilidad es su tristeza, su sufrimiento, su dolor. Me desesperaba, incluso me molestaba y me sigue molestando el saber que no podía hacer nada al respecto, que nunca le iba a poder dar solución a sus problemas ni angustias... Pero bueno, nunca digas nunca, ¿no?

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